No se culpe a nadie de mi muerte, me quito la vida porque dos días más
que viviese sería mucho martirio, verán por qué:
Tuve la desgracia de casarme con una viuda, esta tenía una hija; de
haberlo sabido nunca me habría casado.
Mi padre, para mayor desgracia era viudo, se enamoró y se casó con la
hija de mi mujer, de manera que mi mujer era suegra de su suegro, mi
hijastra se convirtió en mi madre ¡y mi padre al mismo tiempo era mi yerno!
Al poco tiempo mi madrastra trajo al mundo una niña que era mi hermana,
pero era nieta de mi mujer, de manera que yo era abuelo de mi hermana.
Después mi mujer trajo al mundo un niño que, como era hermano de mi
madre, era cuñado de mi padre, nieto de su hermana ¡y tío mío!
Mi mujer era nuera de su hija, yo soy en cambio padre de mi madre, mi
padre y su mujer son mis hijos, mi hijo es mi bisnieto y tío de su tía.
Además, ¡¡yo soy mi propio abuelo!!
Me despido del mundo porque ya no sé quién putas soy...